Medicina Estética Avanzada
O'NAY CLINIC

El número de personas que toman la decisión de mejorar su imagen sin tener que pasar por el quirófano ha llevado a que se hayan instaurado nuevos procedimientos menos invasivos y con menor tiempo de inactividad. Lo último en tratamientos antiedades la RADIOFRECUENCIA FACIAL.
Este novedoso sistema constituye un gran avance en el tiempo de recuperación ya que al ser un procedimiento no invasivo, no agresivo y que además, combina la radiofrecuencia con otros avanzados sistemas de seguridad para supervisar la temperatura del cutis y así regular el tratamiento. Vale aclarar, que tras el procedimiento el tratamiento de recuperación es mínimo.
Cuando se realiza el tratamiento de radiofrecuencia facial, el paciente va a sentir sobre su epidermis un pequeño calor. Puede presentarse un enrojecimiento leve al finalizar la sesión , el que va a desaparecer rápidamente.
Durante el tiempo que dura el tratamiento de radiofrecuencia, se irá percibiendo paulatinamente un mejoramiento de la piel. La tensión de ésta irá en aumento, con lo que se produce el efecto lifting presentando los mejores resultados en cuello, mejillas, pómulos, contorno de ojos y labios.
En sí los resultados son mucho más sutiles que el del lifting y comienzan a hacerse visibles pasados los dos meses, observándose el resultado final pasados los tres meses, ya que el proceso del colágeno en la dermis es lento. Una vez que el colágeno “ha crecido” rellena las arrugas, y la piel se pone tensa.
La radiofrecuencia reestructura el colágeno profundo gradualmente, lo que incluye que se formen fibras nuevas de colágeno que sustituyan a las envejecidas y hagan los tejidos más elásticos, se favorezca la homeostasis y, en general mejore el estado de la piel eliminando de ella las huellas del paso del tiempo.
La radiofrecuencia se emplea principal para tratar la laxitud de la piel, estirando la piel del rostro, y es el procedimiento más adecuado para los pacientes con leve a moderada flaccidez de los tejidos faciales. Por lo general las personas de entre 35 y 50 años.
Mientras que el paciente sea generalmente sano y no tenga enfermedades de la piel o infecciones en las zonas tratadas, hay pocas razones médicas por las cuales los pacientes no puedan someterse a este tratamiento.
Aunque no hay evidencia de que este tratamiento sea perjudicial en mujeres embarazadas, por lo general se recomienda que esperen hasta después de haber dado a luz antes de embarcarse con este tratamiento. Más importante aún, son aquellas personas con dispositivos eléctricos, marcapasos, o prótesis metálicas, articulaciones artificiales de metal en la cadera, válvulas de corazón etc….no pueden ser tratados por la Radiofrecuencia ya que la corriente que fluye a través del cuerpo puede interferir con estos dispositivos.